Decide bien

“Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad. Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda.” 1 Timoteo 2: 1-4,8

Una de las bendiciones que hemos recibido con la prueba que estamos pasando es que ahora oramos mucho más. A pesar que como congregación la iglesia no se ha podido reunir todo este tiempo, nada ha impedido que sigamos en la brecha de la intercesión. ¡A Dios sea la gloria! La fragancia de las oraciones llega al altar de la misericordia de Dios.

El apóstol Pablo le quiso dar instrucciones a su discípulo Timoteo sobre la oración, y en esas instrucciones se considera la oración por los cargos públicos, es decir que debemos orar a favor de las autoridades del país en que vivimos. Necesitamos orar por nuestro país, y necesitamos orar por aquellos que tienen autoridad sobre nosotros, tanto si tenemos preferencia por una opción política o no.

Pablo añadió también que se orara por los que ejercen autoridad. Y esto me lleva a una pregunta, ¿Tengo que orar también por un gobernante que está ejerciendo su poder de una forma injusta, debo orar por un gobierno corrupto? Pablo dijo que teníamos que orar aún en ese caso. Tenemos que recordar que el apóstol escribió esta carta cuando el gobernante de Roma, era nada menos que Nerón.

El gobierno de Nerón fue llamado por algunos historiadores como “el gobierno del terror” Durante los catorce años que duró, el Senado de Roma vivió un ambiente lleno de odio e intrigas. Todos temían ser declarados enemigos del emperador. Fue un período de continuas sospechas y condenas políticas, de conspiraciones y represión despiadada, que terminaría trágicamente con el suicidio del emperador tras haber sido declarado enemigo del Estado por el Senado. En ese gobierno fue que Pablo pidió orar específicamente por el que ocupara el cargo oficial, quien quiera que fuese.

La razón por la que tenemos que orar es para que el Evangelio pueda llegar a todos los que están espiritualmente perdidos sin Cristo, y en el caso de los gobernantes, ellos también necesitan conocer a Jesucristo.

“Ante todo” Tenemos que presentar al Señor: Rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias. Estos términos describen la amplia gama de categorías en nuestra comunicación con Dios.

• Rogativa es pedir por algo. Las oraciones de fe deben ser hechas con una fuerte confianza en la palabra de Dios. Dios promete lo que cumple.

• Oraciones es una palabra que abarca bastante, se refiere a todo tipo de comunicación con el Señor. Te comunicas con Dios cuando tus pensamientos van dirigidos a tu Padre celestial.

• Peticiones, se refiere a las peticiones que hacemos por otros. Es la oración intercesora. Es cuando las necesidades de otro son importantes para ti y las presentas con amor ante el trono de Dios.

• Acciones de gracias, son una parte esencial de nuestro caminar con Dios. Siempre hay motivos para adorar con acción de gracias. Es una virtud cristiana elemental.

A la mayoría de los cristianos les resulta fácil orar por sus familias, amigos y amados, pero no debe terminar ahí. También debemos orar por nuestros enemigos y por aquellos por los que tenemos conflicto. Debemos orar por aquellos que nos molestan, y por aquellos que parecen estar en nuestra contra. Cada una de estas cae en la categoría de orar por todos los hombres.

El orar por todos los hombres también significa orar evangelísticamente. Debemos orar por nuestros amigos que necesitan conocer a Jesús, por nuestros compañeros de trabajo, y por todos con los que tengamos contacto regular. El orar por todos los hombres también significa orar por sus pastores, orar por tu iglesia y orar por otros ministerios que conozcas y ames.

En el Perú tenemos muchos motivos para orar, los enfermos, el consuelo de Dios para los que han perdido gente amada, la provisión importante, y por favor no olvidemos orar por el gobierno actual y por quienes asumirán pronto la responsabilidad de gobernar. Que Dios nos ayude a votar con sabiduría y sin odios ni rencor. Somos responsables como cristianos de decidir orando y tomados de la mano de Dios.

Con amor

Martha Vílchez de Bardales