top of page
  • TikTok
  • White Facebook Icon
  • White Twitter Icon
  • White Instagram Icon
  • White YouTube Icon

“El lazo invisible de la oración”

  • Foto del escritor: IB La Molina
    IB La Molina
  • 2 oct
  • 2 Min. de lectura

“Permanezcan en mí y yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna rama puede dar fruto por sí misma, sino que tiene que permanecer en la vid, así tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen en mí. Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto; separados de mí no pueden ustedes hacer nada.” Juan 15:4-5

ree

Estos días que estoy con mi familia me siento feliz y agradecida, pero también un poquito nostálgica. Extraño mucho a mi hija Betsabé, a Second (mi yerno) y a mi querido Santiaguito, y por supuesto extraño también a mi iglesia en el Perú, que son mi familia espiritual. Y es en medio de esa mezcla de sentimientos que este pasaje viene a recordarme cómo mantenerme cerca de los míos aunque esté lejos.

Estas palabras de Jesús forman parte de lo que se conoce como el discurso del aposento alto (Juan 13–17), son las últimas enseñanzas que compartió con sus discípulos después de la cena, antes de ir al Getsemaní.

En el capítulo 14 les había hablado de no turbarse, de la promesa del Espíritu Santo y de la paz que les dejaría. Y en el capítulo 15 les revela esta verdad tan profunda: Él es la vid, nosotros somos los pámpanos.

Jesús sabía que ellos iban a enfrentar pruebas, soledad y persecución, y por eso les aseguró que el secreto de dar fruto no estaba en las fuerzas humanas, sino en permanecer en Él, día tras día. El Espíritu Santo haría posible que esa presencia y ese poder no se apartaran jamás de ellos.

Y eso es lo que también me sostiene ahora: aunque esté lejos físicamente, puedo permanecer en Cristo, y esa unión me acerca al corazón de mi familia en el Perú y de mi iglesia. Él es el puente invisible que nos mantiene unidos, y es en su amor donde aprendemos a seguir dando fruto, aun en la distancia.

“Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.” Mateo 18:20

Queridas hermanas, las animo a que sigamos permaneciendo en Jesús cada día. No descuidemos la oración pidiendo denuedo, porque es allí donde nuestra fe se fortalece y donde recibimos dirección. Y no dejemos de compartir el evangelio con nuestros familiares, vecinos y conocidos. Aunque a veces parezca un pequeño paso, cada palabra de esperanza que compartimos puede ser la semilla que Dios hará crecer en otro corazón. Sigamos firmes y perseverantes, confiando en que separados de Él nada podemos hacer, pero con Él, todo es posible.

Martha Vilchez de Bardales


Si los devocionales han bendecido tu vida y deseas apoyar la obra que el Señor nos ha confiado, puedes hacerlo con una ofrenda de amor a las siguientes cuentas de ahorros:

  • Cuenta en soles: 0011-0145-0200449680

  • CCI: 01114500020044968004

  • Cuenta en dólares: 0011-0145-0200449699

  • CCI: 01114500020044969904

  • Yape: 998392845

Gracias por sembrar en este ministerio. Tu generosidad nos permite seguir compartiendo la Palabra de Dios y alentando a muchas mujeres y familias.


 
 
 

Comentarios


IB La Molina

Av. 7, 580 La Molina

Av. La Molina 2810 CC. Rinconada

Email: secretariaiblamolina@gmail.com

Celular: +51 998 392 869

Otros servicios

Ponemos a su disposición nuestra moderna infraestructura para las siguientes actividades:

  1. Alquiler de oficinas temporales y permanentes.

  2. Sala de directorio para reuniones y juntas.

  3. Salones multiusos.

  4. Ambientes para eventos corporativos.

Póngase en contacto con nosotros a fin de proveer más información.

Recibir información mensual

¡Gracias por suscribirte!

bottom of page